La Virtud de la Amistad 3a parte

Hemos venido analizando lo que es esta virtud y lo que exige, dentro de lo cual también requiere el afecto a cambio de nada, es decir, es algo que se otorga sin estar esperando el buen pago a cambio, porque sabemos que la vida sabe recompensar, y comienzas a ver los frutos en tu estabilidad emocional, ya no te dejas afectar por la respuesta del otro, porque sabes ser verdadero amigo.

Este tipo de amistad también reconoce cuando la puerta de la oportunidad se abre y le corresponde al otro, cediéndosela sin albergar amargura en el corazón, alienta la esperanza cuando los tiempos no son favorables, estimula para que el amigo no decaiga y mantenga el ánimo para encontrar la solución.

No permite el abatimiento, ya que alguien dijo que el amigo es como el alma de uno mismo, esto significa que empatizas con el sufrimiento de la persona y deseas que triunfe en la vida tanto como lo deseas para ti, por eso, no es cualquier cosa decirse amistad. Esta es la razón del porqué las verdaderas amistades son dones y expresiones de Dios, ya que buscan en todo momento la edificación de la persona.

Cuando somos rechazados por rehusar congraciarnos con conductas inmorales, no debemos permitir que nos afecte, pues si la motivación es hacer lo correcto, no hay razón para dejar que las ideas y emociones nos desestabilicen, al contrario, esto nos debe dar paz y motivación para continuar cultivando esta virtud.

Cuántas personas por el temor al rechazo mantienen relaciones dañinas que terminan siendo muy destructivas, por eso, la amistad tiene que ir integrada con todas las demás virtudes que hemos venido analizando, como la valentía, el trabajo, la responsabilidad, la compasión, la perseverancia, la diligencia, la disciplina, y las que nos faltan por ver.

Para lo que no se usa la amistad, es para la hipocresía, si piensas algo de la persona tienes que desglosarle el porqué piensas de ella de esa manera, para que pueda evaluar y corregir, esta virtud, no acepta que divulgues la información con alguien más para que después le llegue por medio de otros.

Tampoco acepta pláticas mundanas, aquellas que no tienen esencia, que son huecas, ya que le estas quitando el tiempo a la persona y eso es inmoral, esto no significa que nos vamos a quedar mudos, es más bien comprender qué tan importante es nuestra conversación, debe motivar, edificar, tener sentido, significado.

Hay otro aspecto de vital importancia en esta virtud, y es el contacto humano, como lo es el abrazo sincero, la cercanía de las manos al estrecharse con genuino apoyo, la cercanía de los corazones y las almas, todos estos gestos de contacto con el otro son necesarios para desarrollar la amistad, el siguiente poema lo expresa muy bien:

Lo que cuenta en este mundo es el contacto humano, el contacto de tu mano con la mía, más valioso para el corazón desfalleciente que el refugio, el pan y el vino. Pues el refugio se va con la alborada, y el pan dura sólo un día, pero el contacto de la mano y el sonido de la voz siguen cantando en el alma para siempre. Spencer Michael Free.

Como podemos notar, la amistad es lo más trascendente de las relaciones humanas, y muchas veces los deberes para cultivarla compiten con otras obligaciones y afectos que uno tiene. Jesús lo declaró muy bien cuando dijo: “El amor más grande que uno puede tener es dar su vida por sus amigos”, queriendo decir que la profundidad de una amistad inclusive exige que demos nuestra vida.

Ser amigo es más necesario para nosotros que buscar tenerlos, por eso, no busques amigos, busca serlo, ya no pienses en que no tienes amistades, encamínate a cultivar esta virtud bajo las características que hemos analizado y te van a sobrar personas con las que puedes desarrollar amistad.

Los enemigos, también pueden ser nuestros amigos si nos damos la oportunidad de dejarnos pulir nuestro carácter en el trato con ellos, y entonces nos hacen un bien no un mal, por lo tanto, son nuestros amigos aunque ellos digan lo contrario.

Después de haber analizado lo que es la verdadera amistad, nos damos cuenta que esta virtud es oxígeno para las relaciones humanas. Veamos un Plan de Acción para cultivarla:

1. Tener presente que la amistad es un regalo. Es algo que se entrega, no busques recibirlo, tú da regalo de amistad.

2. Ser comprensivos. Es muy fácil exasperarnos con las personas, entre más conocemos a alguien o nos conocen, más vemos sus debilidades y nos las ven, hay que comprender los cambios constantes en los que se encuentran las personas, hay que saber escuchar.

3. Cumplir con las exigencias de la amistad que se han analizado en estos artículos.

4. Ser leales ante las pruebas de la amistad, en días brillantes como nublados.

5. Demostrar amor aunque se vean las fallas que ameritan culpa. Demostrar amor aunque la falla que se cometa tenga una penalización, demostrar ese apoyo para el cambio y corrección, ya que no significa que vamos a aceptar los errores de la persona, vamos a estar ahí para el cambio correctivo.

6. No usar la amistad de manera destructiva. Cuidar la motivación en la amistad, que sea pura, honesta, que construya.

7. Recordar que la amistad requiere de sacrificio.

Tengamos mucho ánimo en cultivar esta virtud, esto nos va a hacer sentir satisfechos al estar haciendo lo correcto, pues la amistad no es tolerar un comportamiento que destruye, al contrario, edifica y anima en todo lo que beneficia verdaderamente al ser humano.

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